He estado con putas, pero gratis

Que la pena cante hoy en oídos sordos

Claro que también melancolía manda

Con su pluma minuciosa

Deshace afanosa

Lo que uno anda

Dejemos que esa nostalgia

Nos bese la cara seca

Jorge Drexler

Algunos hombres cuando se les pregunta si han estado con putas, dicen que no, y seguido dicen que si, pero que no han pagado nunca. En la ùltima parte son muy serios y es altamente probable que agreguen alguna teoria sobre el problema social de la prostituciòn. En fin, tanto tiempo que no escribo que de esto no es que voy a gastar el post.

Ayer apareciò Drexler en Compostela. Un educado concierto en el Auditorio de Galicia. Que no es raro, no, si el vive en España. Que canta en Madrid siempre y cobra seguro. Lo que pasa es fuì yo a un concierto y lo vi como siempre vi a mis idolos y como los hombres no he pagado nunca.

Tengo la buena estrella de que no vivo en la capital donde no existen excusas culturales. No me mal interpreten , no estoy quejandome y los dilemas con los trayectos son siempre en la misma fase de mi propio paso, en piedra , paseando con lluvia y rabia, de la biblioteca del Campus Històrico al centro y un mìnimo cambio al gymnasio. Asi que descubrì que las rutinarias tramas tienen premios antes de cualquier descenlace.

Podìa yo creerlo todo, lo que pasa es que en èl nunca crei , uno no da lo que recibe y lo que se transfroma es con otra gente, no se transforma nada. La vida es mas compleja de lo que parece y lo que nos dan algunos tenemos el talento de hacerlo mierda y convertir los 12 segundos de oscuridad en una pesadilla.

Como todos los irresponsables ya pensaba que iba a salir invicta de la sala y que Drexler estaba bien en Santiago de Compostela èl, no yo que debìa estar en Santiago de Guayaquil. Pero me descubrio y recibi un castigador puñal cantado y que revivìa una verdadera lluvia de noviembres de cosas que no es que recuerde sino que estàn y de lo absurda que es ya la poesìa, no para el mundo, sino en mi boca.

Un dìa normal no, un cumpleaños y una causa perdida: El 19n.

Esto es para ti. Solo pienso en ti. Ya tenemos la misma edad otra vez, cada año sòlo nos separa un embarazo màs largo y para mì en el 82 sòlo nacimos las dos.

Mil años màs Hermosa! No sabes còmo te sigo extrañando y antes màs.

Parece que fue ayer cuando me enseñaste esta canciòn y antes de ayer cuando descubrimos a Drexler en nuestra precaria sociedad de consumo de un pequeño mundo globalizado que yo tuve a bien destruir y que tù en cambio no tienes porque y no debes recordar jamàs.